lunes, 18 de agosto de 2008

Conversaciones de espera

INT. -SALA DE ESPERA UN HOSPITAL- MAÑANA

Una sala de espera de hospital, cuadrada, de un azul intenso, con bloques de asientos dispuestos contra las dos paredes y otro bloque de espaldas a la puerta de cristal con dos hojas que se abren por movimiento. La luz se cuela por una gran claraboya en el techo. Hay silencio interrumpido por el paso de CAMILLEROS, algún MÉDICO y varias ENFERMERAS. En la sala están sentadas seis mujeres desperdigadas en los asientos.

MUJER UNO (37) es menuda, tiene cara de muñeca frágil, no tiene cejas y su pelo moreno está perfectamente peinado. Tiene gesto ausente pero busca con su mirada los ojos de alguna de sus compañeras, como queriendo hablar. Está sola. Dos asientos más allá se sienta MUJER DOS (40), alta, guapa, delgada, con cara viva y alegre, desenfadada. También está sola y le ocurre lo mismo que ha MUJER UNO, quiere entablar conversación pero no consigue tener conexión visual con nadie. A su lado está MUJER TRES (72) callada y sonriente, estatura media, pelo canoso muy corto con algunas calvas, lleva gafas de sol y se mantiene quieta al lado de MUJER OYENTE (40), estatura media, regordeta, cara morena y actitud de atención constante para MUJER TRES, la mira y la agarra de la mano.

A la izquierda de MUJER OYENTE se sienta MUJER CUATRO (35) con pelo largo, rizado y rubio con mechas, es delgada y alta y está sumergida en un cuaderno de sudokus, absorta y seria, como si todo lo que está a su alrededor no fuera con ella. No levanta la vista del cuaderno. A su lado MUJER CINCO(58), rubia, alta y fuerte, su cuerpo es el de una persona que ha trabajado mucho y en su mirada se intuye mucha fuerza. Tampoco tiene cejas y su cara está surcada de varias arrugas que se acentúan al sonreír. Mira a MUJER SEIS (48) morena con melena corta rizada, bajita y que no para de mover su abanico. No hace calor pero ella está acalorada. Lleva una falda larga y se sienta con un gran bolso sobre las piernas.

MUJER CINCO (a MUJER SEIS)
Tardan mucho ¿no crees?

MUJER SEIS
Pues si, no sé que pasará
pero tenía cita a las 12
y media y es la una
y aún no me han llamado


(Voz de megafonía: Rosaura Gómez)

La MUJER OYENTE se levanta y ayuda a MUJER TRES a levantarse que avanza torpe pero segura hacia la puerta, al abrirse hay una ENFERMERA que la coge con cariño del brazo

ENFERMERA
Rosaura ¿qué tal estás?

MUJER TRES
Bien, bien.. ¿Ya hemos comido?

MUJER OYENTE ve que la puerta se cierra sin escuchar la respuesta de la ENFERMERA. Mueve la cabeza mientras se da la vuelta para volver a sentarse en el mismo sitio. Sonríe a MUJER DOS que mantiene su mirada

MUJER DOS
Bueno, parece que esto
se va moviendo ¿no?


MUJER CINCO
Puede que haya sido algo
puntual, pero no sé, el otro
día estuvimos aquí dos horas
porque se había roto
no se qué lámpara


MUJER DOS
¡Pues estamos buenos!

MUJER SEIS
¿No tenéis calor? (se abanica
más rápido) ¿o quizá es que
estoy ya menopáusica perdida?


MUJER CINCO
No, eso será la quimio,
seguro, que trastoca todo


MUJER SEIS
La verdad es que yo
no lo he pasado tan mal
como dicen


MUJER DOS
Es que no te cuentan
todo cuando empiezas
con la quimio, porque
¿a vosotras os han salido manchas?
Porque a mi justo en los
pies me salieron unas…


MUJER SEIS
¿Manchas? A mi no, solo
los sofocos, a veces mareo,
pero ni cansancio,
ni nauseas… lo único este
calor eterno… bueno,
y el pelo, claro


MUJER UNO mira a unas y a otras entre incrédula y animada, tiene ganas de hablar, mira a la MUJER OYENTE y luego a la MUJER SEIS

MUJER UNO
¿El pelo? A mi se me
cayó todo… hasta las
cejas (murmura), pero
bueno, ya saldrá


MUJER DOS
¡Y a mi! Pero nada,
que no crece, solo una
pelusilla… todos me dicen
que no lleve peluca pero
es que, así de pelona…
como que no me veo.


MUJER CINCO
Pues yo estoy harta
de la peluca, no sé
cuando va a crecer el puñetero


MUJER SEIS
¿Y habéis probado a cantarle?

TODAS LAS MUJERES A LA VEZ
¿Cantarle? (Risas)

MUJER SEIS
Si, si, yo le canto
todas las noches
(entre carcajadas),
así crece más fuerte


Un clima amable se mueve por la sala de espera, como se si hubiera roto la tensión existente. La MUJER OYENTE sonríe y también la MUJER CUATRO que no ha levantado la vista de sus sudokus, pero no ha perdido detalle de la conversación. Tiene una actitud extraña, como de distanciamiento, de frialdad pero esas bromas entre las enfermas la han tocado en algo y no logra concentrarse del todo. Se intenta esconder de todas las miradas pero MUJER CINCO se dirige a ella directamente, como intuyendo sus pensamientos

MUJER CINCO
Y tú, ¿te has dado quimio?

MUJER CUATRO la mira y titubea al responder

MUJER CUATRO (moviendo la cabeza)
No…no… so-solo… solo radio…

MUJER CINCO (asintiendo)
Claro, claro


MUJER SEIS se abanica con fuerza, está colorada, pasándolo mal pero no para de sonreír

MUJER DOS

Uff… la espera es eterna
y luego para estar ahí
solo dos minutos con el
brazo en alto… aunque prefiero
que arreglen bien la máquina
no siendo que el rayito
ese toque lo que no debe.
Tengo tanto miedo a que
eso pase que cuando entro
estoy como si hiciera pesas,
ahí tumbada y con el cuerpo
en tensión


MUJER UNO
No mujer, lo tienen todo
controlado, aunque la verdad
es que es complicada
la posturita!!


Se sucede un silencio breve cuando la puerta automática se abre y sale una AUXILIAR (45) morena, alta que avanza mirando a las mujeres, se detiene un momento

AUXILIAR
¿De qué queréis los bocadillos?
¿Cuántos de tortilla?


MUJER CINCO
Ays pues uno de lomo con
pimientitos no estaría mal!


MUJER DOS
Vamos a tener que esperar mucho?

AUXILIAR
Están intentando solucionarlo,
pero ya os avisamos si van
a demorarse más tiempo,
no os preocupéis. Hasta luego


MUJER DOS, CINCO Y SEIS
Hasta luego…

Las mujeres se quedan mirando hacia donde ha desaparecido la AUXILIAR

MUJER DOS (a todas)
¿Os habéis fijado en esas
máscaras que hay ahí dentro?


MUJER OYENTE va a intervenir pero MUJER UNO se adelanta

MUJER UNO
Es para los que tienen
que recibir radio en la cabeza,
se la hacen con una
abertura donde le dan y
proteger el resto de la cabeza


MUJER DOS(mirando de
reojo a MUJER OYENTE)

Son impresionantes…
hay que ver lo que se
tiene que pasar…


Silencio


MUJER SEIS (abanicándose)
Yo creo que además de la
quimio y la radio,
el tratamiento debería
concluir con una semana
en un balneario ¿no creéis?


MUJER CINCO
¡Qué buena idea! Aunque
a mi que me magreen
no me gusta nada…
llevo no se cuantas sesiones
de fisio


MUJER DOS
¡Pero no compares!
El fisio hace daño, pero
un masaje relajante…
ay! Si! debieran incluirlo


MUJER UNO (entre risas)
¡Y una sauna! ¡¡y un jacuzzi!!

MUJER DOS
¡Y un guapo masajista!

La risa es generalizada, tan alta, que se acerca una AUXILIAR de la recepción a echar un ojo. MUJER CUATRO levanta la cabeza para escuchar a esas animadas mujeres que viven en su misma “tragedia” y que se ríen tan abiertamente. MUJER CINCO y SEIS mantienen una conversación como también lo hacen MUJER UNO y DOS pero MUJER OYENTE observa a MUJER CUATRO y su incomodidad

MUJER CUATRO (murmura)
Tengo cáncer…

Nadie parece percatarse de sus palabras, incluso MUJER OYENTE intenta no importunar sus reflexiones. MUJER CUATRO emborrona el cuaderno de sudokus con palabras que sueltas no tienen sentido pero que para ella lo tienen.

(Imágenes del cuaderno, tengo cáncer, no es lepra, salud, quimio, sin pelo, hablar, Luis, madre, Ana, reír….)

Voz megafonía: Francisca Pascual

MUJER CUATRO para de escribir, suspira, mete el cuaderno en su bolso y se levanta

MUJER CUATRO (a todas las mujeres)
Gracias a todas… aunque
les parezca increíble, después
de escucharlas hoy,
(respira hondo) he aceptado
mi enfermedad… Por favor,
apúntenme en esa recogida
de firmas para que
Sanidad incluya lo del balneario
después de la radioterapia.


Entra decidida por las puertas y las MUJERES se miran sin entender muy bien a qué ha venido esa manifestación. MUJER TRES y la ENFERMERA salen a la vez que entra MUJER CUATRO. MUJER OYENTE se levanta para acercarse y ayudar a MUJER TRES a caminar

MUJER TRES (a MUJER OYENTE)
¿Te lo puedes creer? ¿Que
me dice ella que aún
no hemos comido?
¿Podrá ser posible? Pero si yo…


MUJER OYENTE
Mamá, no, no hemos comido,
ahora cogemos el coche,
volvemos a casa y será
la hora de comer…


MUJER TRES
Hay que ver… yo creo
que vosotros movéis los
relojes… no puede ser



Desaparecen de la sala de espera y se sigue oyendo las quejas de MUJER TRES pero en la sala de espera se guarda silencio, MUJER UNO calla y aunque tiene ganas de hablar mantiene su mirada fija en la pared, lo mismo le ocurre a MUJER DOS y CINCO, mientras que MUJER SEIS se abanica rápidamente


FIN… o no.

(Escena entre real y ficción, dedicada a todas esas personas que luchan y que se ríen a pesar de la adversidad. Personas increíbles)



9 comentarios:

Tamara dijo...

Querida Merche,
Hablar de la enfermedad es un acto de liberación y descanso cuando la compartes con otros que pasan por lo mismo, sobre todo cuando el tratamiento te inunda de dudas y preguntas que otros sienten igual. Pero lo que más me ha gustado de tu guión, lo que me ha hecho disfrutarlo al máximo, es el sentido del humor con el que has enfocado el objetivo. No hay asomo de dolor que no deba ser neutralizado con una buena carcajada. Los dramas están ahí, se van intuyendo en la presentación de cada una de las mujeres, las frustraciones, el miedo, la angustia y la rutina. Pero también hay energía, fuerza y ganas de vivir. Y toda la risa que se pueda compartir.
Sólo un detalle: el final estremece, quizás por próximo, por cercano, real. Qué bien habría venido una buena carcajada final...
Besitos y me alegra que hayas inyectado de buena vidilla este blog.

Avellaneda dijo...

Puede que tengas razón en cuanto a la carcajada final Tamara pero no sé, la enfermedad es algo tan curioso... puede ser algo muy grave en lo que una se ve inmersa pero te da por reir, por hacer de tripas corazón, lo que ocurre es que lo que hay es lo que hay. No creas que no he pensado en terminarlo con una sonrisa o con una carcajada, pero finalmente he querido dejarlo tal como es, no se me ocurria mejor manera (y mira que esa persona real da para muchas risas!)

Un beso guapa, intento hacer este espacio un poco más activo pero no creas qeu las ideas fluyen tan bien... debe ser esta pereza :o)

EL INSTIGADOR dijo...

La enfermedad, los tratamientos. Todo me resulta tan familiar... Verse rodeado de similares ayuda mucho a comprender que tu sufrimiento no es único. La fuerza para seguir se obtiene no solo de tu entorno sino de las lecciones de vida que te dan aquellos que pasan por lo mismo que tu.

El humor socarrón ante la desgracia y ese puntito de reirse de uno mismo es fundamental para asegurarse de que ante todo, merece la pena seguir viviendo.

Gran guión. Me ha encantado.

Besos y muchos ánimos.

Avellaneda dijo...

Muchas gracias Instigador porque tenía dudas de si este tema puede no ser tomado a bien por personas que han pasado por ello, no en vano yo lo cuento desde la barrera, desde ese familiar que acompaña. En mi caso con esta manía de quedarme con lo que no se ve...
Creo que la risa es la mejor arma ante la enfermedad, en serio, espero que si debo encontrarme en esa tesitura pueda ser como esas mujeres tan alegres incluso ante una sesión diaria de radioterapia

Un beso enorme campeón, gente como tú si que merece la pena (y no es peloteo eh? es una frase totalmente sincera)

Miguel Molina dijo...

Pues a mí me ha encantado la historia. Creo que el tema está tratado de forma perfecta, así que en principio no creo que nadie deba ofenderse con él.

Una delicia de principio a fin. Vaya desde aquí mi más fuerte apoyo a todas aquellas personas que día a día luchan por la vida

Nos vemos

Avellaneda dijo...

Gracias Miguel en estos temas nunca se sabe pero está claro que mi intención era plasmar esa conversacion que surgió de esa manera tan natural y sencilla.
Un saludo

mera dijo...

Es un tema duro, lo cuentas muy bien y muy cinematográfico.

Avellaneda dijo...

Hola mera gracias por entrar por aquí y leer mis escenas. Te conozco por el blog de Tamara y de vez en cuanto paso por tu faro, no creas. Un abrazo y aunque este espacio no lo actualizo como yo quisiera, espero que pronto pueda publicar más.

Anónimo dijo...

http://psicologia-malenalede.blogspot.com